Un día normal, de Junio, a fin de curso, los del colegio Ángel Andrade veían que sus cosas no estaban. Decían que eramos los del colegio Dulcinea. Nosotros, un poco fastidiados dijimos que no habíamos sido nosotros y ellos decían lo típico de ''Mentira...'', entonces dejamos de hacerles caso. a los pocos días de lo sucedido, a Doña Consuelo le llegó una carta, ( concretamente al colegio), que decía: Los del colegio Dulcinea, tendran problemas graves, ja ja ja. Anónimo. Todos pensamos que era el Anónimo del colegio Ángel Andrade, entonces llamamos al timbre del Ángel Andrade, y nos contestaron con un
sí rarímo, así que dijimos todos a la vez:( bueno, los de 1º dijieron que que era un anónimo y nos reímos mucho; los de 2º que que pasaba; los de 3º qué porque, ( ellos estaban de salida); los de 4º nada porque estaban jugando; los de 5º y 6º dijimos que porque nos habían culpado, si saben que les dijimos que no habiamos sido nosotros... Y en fin..., nos cortaron el timbre.
Al día siguiente, vimos todo destrozado y llamamos a la Policía y nos dijieron, que la próxima iban a venir... Nosotros, asustados por si nos pasaba algo, nos escondimos debajo de la mesa, pero la directora dijo que esto no se iba a quedar así y entonces llamó a la Policía, de nuevo, para que nos dieran lo que nos habían quitado y destrozado.
Al final, todo se solucionó y descubrieron quien había hecho el robo al Ángel Andrade, eran unos delicuentes. Desesperadamente, nos dijieron: ''mil perdones''.
By: Jorge Céspedes.
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